Las joyas de oro son accesorios invaluables, que aunque jamás pierden su brillo, con el uso y paso del tiempo pueden acumular impurezas y suciedad.
Para que tus anillo, pendientes, collares o pulseras de oro estén siempre en buen estado, te brindamos estos consejos a implementar y lucir así, joyería radiante.
- Vierte en un cuenco agua tibia con unas gotas de detergente de lavavajillas y mezcla bien. Cuida de no usar agua muy caliente o hirviendo, sobre todo si tus joyas tienen piedras preciosas, ya que pueden ser dañadas con la alta temperatura.
- Introduce tus joyas en la mezcla y déjalas sumergidas durante 15 o 20 minutos. Si tus joyas tienen perlas, no recomendamos que las sumerjas más de 10 minutos, ya que el jabón y el agua pueden dañarla.
- Frota cada joya con un cepillo de cerdas suaves e intenta lavar todos los recovecos de la pieza, pero con delicadeza.
- Enjuaga cada pieza con agua templada, asegurándote que no queden restos de jabón.
- Seca a conciencia cada pieza con un paño suave y déjalas secar por completo al aire libre.
Para que tus joyas siempre estén en buen estado, sigue también estos consejos:
- Guarda tus joyas en bolsitas de tela separadas o en las mismas cajitas que las adquiriste, el roce entre ellas evitará que se rallen.
- Evita que tus joyas tengan contacto directo con productos de limpieza y perfumes.
- Trata de no usar tus joyas de oro cuando vayas a la playa o a la alberca, ya que tanto la sal del mar y el cloro de la piscina pueden dañarlas.